En esta ocasión y a pesar de las bajas importantes, hemos vuelto de nuevo a la Muela de Alarilla.

Los intrépidos asistentes: Álex, Carlitos, Pepe «el de Guadarrama» y yo mismo. Ha coincidido además que se celebraba
un evento en Pedro Bernardo (Avila) y no había ningún parapente/ala que pudiese estorbarnos.

La jornada empezó mal , porque con las prisas y la impaciencia por disfrutar de la situación , nos equivocamos de vertiente en la ladera y tanto Álex como yo supimos en carne propia lo que es lanzar un avión y que sea absorbido al fondo de la ladera sin casi poder tener ocasión de recuperarlo.

El resultado , como os podéis imaginar , son el DG 1000 con rotura de ala (en la misma zona que había reparado la noche anterior) , y el easy glider en no mejores condiciones.

Tras pagar la novatada (digamos mejor precipitación) nos posicionamos donde debíamos con los aviones de reserva (importante tener resuelto este asunto para no hacer tantos Km en valde). Ahí la cosa cambió sustancialmente y pudimos disfrutar de interminables vuelos . Una gozada.

También tuve oportunidad de desplegar el nuevo ala que intentaré montar en el paratrike RC y que tantos quebraderos de cabeza me está creando (fundamentalmente por ajustar un ángulo de ataque válido).

El tiempo nos acompañó afortunadamente y no hubo el calor sofocante que esperabamos. Además , al estar todo el mundo en Pedro Bernardo pudimos ponernos bajo el toldo del bar que hay en la cima. Tortilla y morcilla hechas por la mujer de Pepe, cervecitas, tinto de verano, tertulia …

En fín , todo un éxito que esperamos volver a repetir pronto.